No hay mayor indicio de pobreza intelectual que creerse primero las mentiras que descaradamente nos inventan. Los mandos de toda índole, entre privados y públicos como también los "transitorios" (aquellos que hacen el traspaso de un lado al otro sin saber quienes son...) no sólo las propician o las generan... no sólo eso: ¡Se las creen descaradamente! Ya esa mitomanía no es enfermedad sino más bien una especie de virus mental que hace mella en las mentes letradas, ilustres y finas de nuestros epítopos patricios; curados y absortos en el cúlmen supremo del conocimiento humano.
No hay parangones; los sistemas de referencias no existen y para ellos simplemente impera el grueso rector de su rostro amable con el fuste blandido en la muñeca. Aquí se hace lo que ellos dicen y no hay pauta para las opiniones de los demás... aquí hay democracia, libre expresión y todas las demás sutilezas que esta sociedad libre e ilustre, brilla con esplendor y prestancia.
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| Panorámica de la ciudad de Barranquilla |
Nunca he podido entender el porqué la desigualdad se fomenta y se mantiene en una ciudad, que sabe de sobra y con creces, que el crecimiento en todos sus índices será notable si esa misma brecha se reduce. ¿Por qué el empresariado, los intelectuales, los rectores de las Universidades, la dirigencia gremial y la pública, en fin... todos los llamados representantes de la gestión de la ciudad en todos sus niveles, no trazan postulados, saberes y acometimientos con tal de reducir la brecha social de la ciudad?.
La razón no estriba en esa pregunta, todavía hay más ¿A qué se debe de que no es del interés de los inversionistas locales y foráneos que la educación en la ciudad de Barranquilla no alcance mejores estándares de desarrollo? ¿Acaso no se han puesto a pensar que tal y cual como va el ritmo de desarrollo humano y social de la ciudad estamos camino hacia un desmoronamiento social y económico?
Ningún desarrollo óptimo existe si las diferencias sociales entre las diversas capas componedoras del tejido social de una ciudad se hacen tan inimaginablemente grandes e irresolutas. Si a lo anterior le agrega que no se suscita ninguna clase de interés por remediar y pailar tamaña diferencia, entonces la situación toma otro cariz.
En Barranquilla no vamos bien... No son obras, algunas de ellas hasta pésimamente trazadas como se ha demostrado hasta la saciedad. No son los decires escatológicos del Heraldo y menos las diatribas insensatas de La Libertad. Ellos nos mal informan, Ellos no orientan en lo absoluto, Ellos nos contradicen y sólo sacan noticiábulos por causas emergentes y de urgencia. Del resto nada... no existe ni la esencia ni la sustancia. La mediocridad informativa en la ciudad y la falta de información de contenido asusta.
La pobrísima argumentación con que salen a la palestra, la falta de informes de investigación de fondo y esa estrategia de vender el papel a punta de mujeres desnudas causa alarma. ¿Alguien ha visto al Heraldo hacer una investigación de fondo de los motivos de la violencia actual en Barranquilla y las bandas urbanas? de La Libertad mejor ni mencionar...
¿Dónde estamos progresando intelectualmente? Dígame... Años atrás habían mejores museos, tertuliaderos, librerías excelsas y hasta se presentaban mejores cantantes. Había una interrelacción más directa entre buenos escritores y las urgencias por lecturas supremas. Puestas de obras teatrales y hasta operetas. Toda esa sintonía se perdió... inexcusablemente... ¿Cuáles son los aportes de La Universidad del Norte?, tanto que se precia ella misma de ser la abanderada del conocimiento prístino de la ciudad. No vemos ni obras literarias nuevas como tampoco el interés en difundir a los nuevos, no vemos a los artistas plásticos como tampoco el deseo de difundir lo propio, no vemos aportes certeros, sinceros, sensatos... Simplemente no creemos en lo nuestro.
Entonces surge la pregunta: ¿Usted si cree que como sociedad estamos experimentando un crecimiento intelectual? No todo es plata... La desculturización de la dirigencia en la ciudad de Barranquilla y su meimportismo bellaco nos está llevando al traste... Simplemente no tienen una reverenda idea de lo que se trata y de lo que en el fondo, puede positivamente aportar, si se propicia su crecimiento.
Víctor Hugo Marenco Boekhoudt
Una ciudad donde un congresista oriundo estuvo presente en 2 de los asesinatos más sonados, donde la primera promoción de gestores culturales se 'graduo' amenazando a quien se opusiera y hoy dirigen (se hacen ricos con) lo cultural en la ciudad, donde el facilísimo es exaltado como obras maestra es muy difícil creer que haya un renacer.
ResponderEliminarEse no aprender del pasado y creernos adanicos en todo desconociendo una historia escrita en anales; y hoy, con los actos que se ejecutan pareciera que desearan refundar una nueva ciudad, una ciudad hecha a la medida de sus escritorios, de su cadena de frío, de no enfrentar sus realidades sino ver su virtualidad como si un HT nos pudiera cambiar el chip.
Vamos sin rumbo, sin historiadores tenidos en cuenta, sin investigaciones que nos pagan los pies en la tierra, vamos danzando al capricho de nuestros dirigentes creyéndonos mentiras como eso de la capital cultural de América, la ciudad más feliz, sabiendo q como dijeron, somos el mejor vividero por la cantidad de vivos que aquí se dan.
Creo estimado lector y con la sola insistencia en propender por un futuro mejor, seguiremos teniendo esperanza... No siempre el futuro va a ser de ellos. La inmediatez hará que postren en sus trastes.
Eliminarcreo en una Colombia pujante de la cual todos debemos participar.
ResponderEliminarla pregunta es que hacemos para que esto se de acaso hemos sido dolientes de la herencia que vamos a dejar a nuestros progenitores
con todo el respeto que nuestra sociedad se merece mientras el pueblo vote pero la registraduria elija estamos jodidos.
jodidos por no hacer nada jodidos por estar encerrados en una cárcel llamada corrupción. donde hoy día no hay democracia por que prima un capitalismo que se puede contar a dedos.
Lo peor de todo es que somos unos ASES de la quejadera, pero no apoyamos con nuestra asistencia a muchas actividades que se realizan en la ciudad como Barranquijazz a la Calle, Carnaval de las Artes, exposiciones en La Aduana, conferencias en el Parque Cultural del Caribe y muchas mas.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con obras de desarrollo fisico para la ciudad. El mejoramiento y rehabilitacion de los parques y vias, los megacolegios etc no seran de mucho sino se ponen en practica costumbres civilizadas acordes con el desarrollo, como lo es darle sentido a las entidades culturales de la ciudad la cuales son fortines para ocupar vacantes de los amigos de los politicos y de los llamados promotores culturales y no para la promocion permanente de verdaderos actos y funcioness culturales. Tampoco creo que estemos bien culturalmente mientras en la mayoria de las estaciones de Transmetro no existen los nombres de los verdadeross nombres que forjaron el desarrollo que de la puerta de oro siendo que los actuales nombres podrian aparecer en un parque u otro lugar adecuado. Realmente los nombre de hombres de progreso y desarrollo fueron sustituidos completamente por bailarines, algunos cantantes o amigos del consumo de la droga.
ResponderEliminarPara hacer una nueva ciudad debe impregnársele otros aditamentos. Culturalmente, intelectualmente y socialmente, por sus estándares y cifras la ciudad de Barranquilla experimenta un decrecimiento notable. Por favor, cuando se trae a un Rafael Pombo u otras personas a hablarnos de salsa en el Carnaval de las Artes con Andy Montañez eso si deja mucho que desear. Antes estábamos mas conectados a otras vertientes, como la del Caribe pero lo triste no es eso... lo triste es que no propiciamos nuestras expresiones como tampoco creemos en lo nuestro... ¿Para que se construyó la 79 si en la 59B y en la 60 se forman unos trancones inimaginables a toda hora? De todas formas, agradezco sus comentarios... de alguno u otra forma tendremos que despertar...
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