LA MATEMÁTICA Y NUESTROS ENTORNOS

Todos nos cuestionamos todo. No tenemos por qué lamentarnos por soltar interrogantes hacia todas direcciones, pero a ciencia cierta y siendo inherentes al comportamiento humano: ¿alguna vez se ha preguntado por la razón de ser y la esencia de la ciencia matemática?. ¿Todavía sigue creyendo que es por calcular simplemente?. ¿Por qué apareció en varias civilizaciones antiguas que no tenían conexión alguna?. El conteo con los dedos de nuestras manos fue el inicio, pero la complejidad asociativa no fundó el concepto matemático (ni que fuésemos los más ilusos)... No pretendemos afianzar estos razonamientos con base en preguntas, pues no llegaríamos nunca a algún lugar. Se necesitan conclusiones y respuestas creíbles, sin entrar a despreciar los fundamentos de una ciencia que no se sabe si es natural o formal. (Por decirlo, la Física es una ciencia natural y la Filosofía es formal, ya que se basa en planteamientos ideológicos para hacer validaciones). Las diferencias estriban en la referenciación de sus conceptos. 

No tenemos idea si las estrucuras en la que se fundamenta la matemática se descubren o se inventan. No hay matemática aplicativa; hay más bien, simples y sesudas aplicaciones matemáticas. ¿Acaso el número Pi (π = 3,141586... que es la relación de la longitud de la circunferencia con su diámetro), literalmente, ¿fue descubierto o fue inventado?. Tomo partido por la invención, pero sin excluir las muchas pautas que la matemáticas entrega a diario. Diríamos que las prácticas diarias de cualquier disciplina y el esoterismo, se enriquecen mutuamente con base en la matemáticas. En términos prácticos, o dicho de mejor clara manera, las matemáticas puede ser una ciencia abstracta y descriptiva, pero a su vez, ante las ciencias naturales, los procesos matemáticos teóricos y ante todo, los abstractos (que brindan análisis sin referencia natural alguna), poseen características visionarias y marcan el derrotero de las ciencias naturales sin proponérselo. Ejemplo de eso son los procesos de derivación o integración de leyes físicas que alcanzan su reformulación aplicativa, cuando en términos abstractos, ese procedimiento se conocía en matemáticas hacía rato, sin saber cómo proceder en lo aplicativo. 

No hay hasta el momento estudios que muestren la logicidad del "adelantamiento" (llámelo posiblemente pre-visión) de la ciencia matemática con relación a las naturales, pero ocurre, pasa, sucede siempre... No es que sea evidente porque no existe la predicción matemática en lo absoluto ya que sería un absurdo garrafal. Lo cierto es que en la organización de las pautas informativas (entiéndase como "Informática" o como también, la mal llamada "Ciencias Computacionales"), la matemática es la aglutinadora, argumentadora y correlacionadora fundamental. Sin mediar ninguna clase de incoherencia, la inteligencia artificial se utiliza, con base en las llamadas redes neurales de forma exitosa, para la validación de las demostraciones matemáticas complejas. Es decir, la matemática ayudándose así misma e ilustrándonos en el comportamiento y la torsión de las cadenas de aminoácidos. El trasfondo del conocimiento matemático no es el análisis de números o factores, sino el aspecto relacional. Por efectos educativos, en Colombia nos hemos quedado en el formalismo matemático radicado en la solución de problemas irresolubles. Nos olvidamos de los enlaces conectivos, de los preceptos tautológicos, su vínculo con la verdad, la ética, los valores morales y la equidistancia; es decir, todo aquí en Colombia por la pobreza formativa, se lo dejamos a los pareceres y apartamos la esencia de la ciencia matemática, al cuarto de San Alejo.

Víctor Hugo Marenco Boekhoudt