sábado, 22 de abril de 2023

PETRO SE APRESTIGIA

Por Víctor Hugo Marenco Boekhoudt
20 de abril del 2023

Años atrás, estábamos acostumbrados que todos los Presidentes de Colombia, llegaban cabecigachos y en actitud de ruegos a las audiencias con los de los EEUU. Prácticamente se postraban, sumisamente consentían todo a sus pechos y espaldas, mientras salían a dar efusivas declaraciones, constatando que les había aprobado destornillándose en risa y felicidad. Como si todo se circunscribiese a tener al “jefe” lleno de contenturas y satisfacción. Con Petro la mecánica cambió: se habla directo, se anteponen las coordinaciones, se enfatizan las querencias y se plasman acuerdos, como deben ser las relaciones entre dos países.

En diplomacia te tienes que convertir en un experto pisador de cáscara de huevos, o en un volatinero bien ejercitado; eso sí, con mucha observancia e inteligencia de por medio, nunca en las medianías, ni jamás por los costados. Si eres de un país pequeño, todo lo anterior ayudará muchísimo más… Entonces esta piara de políticos anatemizados, de versiones desastradas, mustios, asustadizos y llenos de hipo cuando iban a la Casa Blanca, quedó atrás. Pastrana el taimado, mandó una carta que Biden ni leyó. Esa recua pretérita, insapiente y de viejas usanzas, se explayó viendo un chispero con las novedosas trazas de diplomacia efectiva de Gustavo Petro.

Fue Petro por el Amazonas, salió con quinientos millones de dólares (el contribuye con ciento cincuenta), propone la temática de la transición hacia las energías limpias (aunque hablamos del fin y no de cómo transitar al objetivo), y correcto, también le “toman la caña” y a su vez, prospecta el cierre energético con Panamá, lo cual es un gana gana para Centro y Suramérica. ¿Hasta cuándo no se van a convencer todos estos fardos mal embolsados que no es por ser de izquierda o de derecha?. La razón estriba en el bienestar común de todos, en el manejo de políticas con base en soluciones mancomunadas y en hacer las cuentas claras. Petro hasta llegó a evanecerse un poco, algo que los periodistuchos de por aquí, catonizan como el orgullo de él: fibrilan y titubean…

¿No observaron el respaldo a las reformas de salud, laboral y pensional que le extendió Biden en sus declaración final?. Así lo obtemperó con tajancias: “Sé que compartimos una visión pacientemente en conjunto: que es la de darle dignidad a los derechos de los trabajadores en particular” (la traducción anterior es mía. La de la traductora de Biden no me pareció idónea ni acertada). Por eso leguleyistas de trasnochos, por lo anterior y por lo que viene, piénsenlo bien. Aquí además de respaldo, hay sensatez y equidistancia.

No es el mundo ideal, tampoco quiere decir que no existan diferencias. Quizá algo notorio fueron todo lo relacionado con el manejo de las drogas y agendas colaterales, como para no perderse en dédalos de diplomacias; tampoco es el mundo ideal. Al tiempo que Petro se aprestigia, levanta ánimos y se convierte en un excelente interlocutor para aupar lo de Venezuela, él también está pensando en que ese clima le conviene al comercio, a la región y a las mutuas conveniencias. Lo siento por ustedes logomáquicos funestos: se quedaron sin referencias. Los seres inteligentes sí sirven, las pautas se hacen es tomando iniciativas, se proponen alternativas, se plasman soluciones y se enfatiza otra clase de naturaleza que nada tiene que ver con la vetusta manía de complacer al jefe para que quedara contento. Si ellos anteriormente cerraban los ojos, ahora los tendrán bien abiertos y a ustedes son los que van a detallar. La unipolaridad se marcha, sin embargo esas localías excluyentes, se van junto con ella con las maletas llenas de pesares, dolor y pérdida de tiempo. Todo era tan fácil y tan práctico, abjuradores de espantos…

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